miércoles, 22 de agosto de 2007

París, mon amour

Tampoco puedo olvidar el día en que se me ocurrió llevar a mi hija a Disneyland París. Éramos cuatro: una amiga, nuestras respectivas hijas y, naturalmente, yo.

La odisea empezó en el aeropuerto. En facturación de Aquí nos pidieron la documentación y yo, por un pequeño despiste, me había olvidado el pasaporte en casa. Para quién no lo sepa, viajar con una menor y no tener pasaporte es todo un problema ...

Por una vez en la vida, el avión salía a su hora y no me daba tiempo de ir a casa, coger el pasaporte y volver, así que le di las llaves a una amiga y le encargué mandarme el pasaporte al hotel de París.

Tras mucho discutir, (más bien de rogar), en facturación nos dieron un documento que teníamos que presentar en el puesto de policía de Madrid, antes de coger el vuelo a París.

Por desgracia así lo hicimos. Al llegar a Madrid fuimos a la policía y nos atendió un comisario, o algo así. Le explicamos todo y le entregamos el documento. El comisario o sargento tenía una cara que daba miedo, no sé qué le habría pasado ese día, pero hizo unas cuantas llamadas telefónicas y me preguntó (muy de mala leche) que si mi hija estaba registrada en mi pasaporte.

Tengo la mala costumbre de reírme en los momentos menos oportunos, por ejemplo, cuando estoy nerviosa. Y en ese momento lo estaba, y mucho. Así que le contesté, riéndome, que no lo sabía. Y era verdad, no me acordaba si mi hija estaba registrada o no en mi pasaporte.

Pero él se lo tomó mal, pensó que le estaba tomando el pelo, y de repente, empezó a gritar como un poseso que no nos moveríamos de allí hasta que mi pasaporte no estuviera en sus manos...

Casi nos da algo. Salimos arrastrándonos de ese maldito despacho y nos sentamos en una cafetería viendo cómo se esfumaban nuestras vacaciones, el dinero que habíamos pagado y nuestra ropa, que se iba a París sin nosotras.

De pronto se oyó por un altavoz : "último aviso para los pasajeros del vuelo no sé qué, con destino a París", nos miramos, nos levantamos y salimos corriendo. Cruzamos el aeropuerto como galgos detrás de una liebre, arrastrando a las pobres niñas que no se estaban enterando de nada. Y llegamos, sofocadas, despeinadas y hechas polvo, pero a tiempo.

Nadie nos dijo nada, nos dejaron pasar, es más, los pasajeros nos miraron con cara de "ya era hora" porque llevaban un rato esperando por nosotras. Tras las típicas disculpas del capitán por el pequeño retraso, el avión se puso en marcha. Yo miraba de vez en cuando para atrás, por si aparecía el comisario ese y detenía el vuelo. Pero no, no se enteró.

Cuando abrí los ojos allí estaba, como una maqueta de juguete, la torre Eiffel. ¡Estábamos en París! ¡Con nuestras maletas! Y así fue cómo pisé por primera vez, suelo francés: como una perfecta delincuente.

Muy mono Disneyland. No me quiero ni acordar las veces que estuve a punto de vomitar con tanta noria y tanta tacita de La Bella... Es que las tacitas de La Bella, repersentan la sofisticación más absoluta del mareo. Además de girar sobre una plataforma, giraban sobre sí mismas a una velocidad de vértigo. Dos giros inversos y simultáneos. Sólo de escribirlo me mareo.

Pero a mí me interesaba París. Y al cuarto día, llegamos.
En París todo el mundo habla francés. Menos mal que había letreros. Pero casi todos ponían " SORTIE" , o algo parecido. Dedujimos que significaba "SALIDA", así que, los tres días que estuvimos allí, nos dedicamos a salir de todas partes. No pudimos salir de Notre Dame porque estaba cerrada por reformas. Tampoco salimos de los jardines de Versalles porque ese día diluvió. Pero bien.

Eso sí, la comida era cara. La última noche cenamos en una terraza de no me acuerdo qué calle, pero era céntrica. Muy fino y muy bonito todo, pero en la ensalada había una mosca. Llamamos al camarero y le dijimos : "Una muuj en la salad", pero no quiso entendernos. A cambio nos trajo la cuenta. La ensalada quedó intacta, pero creo que nos cobró la mosca.

Y así terminó nuestro viaje a París. Volvimos sin ningún problema.
Al par de días recibí una llamada de Francia, desde el hotel donde nos habíamos alojado. Sólo querían decirme que mi pasaporte estaba en recepción, que qué tenían que hacer con él...

¡¡¡ Dioooos...!!!!

7 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajajajaja. Y luego dicen que viajar es relajante.

Comentado originalmente en Ya.com el 23 Agosto 2007 01:41

Anónimo dijo...

lo de la mosca jajaja ainss mu fuerteee

Comentado originalmente en Ya.com el Jueves, 23 Agosto 2007 01:45

Anónimo dijo...

Vaya, por fin te encuentro. ¿Quién lo iba a decir? Te escapaste de mi comisaría aeroportuaria y me abrieron un expediente: toda mi inmaculada carrera policial al garete por culpa de una irresponsable con la risa tonta. Y los franchutes te dejaron entrar ... ¡qué panda de irresponsables! Pero ya te pillaré, ya ...

Comentado originalmente en Ya.com el Jueves, 23 Agosto 2007 02:38

Anónimo dijo...

Pues menos mal que conseguisteis viajar y disfrutar de esos dias... que si llega a llegar el pasaporte y vosotras no!!! Jajaja!!!

Un besoteee y encantada de conocerte. Nos leemos!!!
Comentado originalmente en Ya.com el Jueves, 23 Agosto 2007 15:46

Anónimo dijo...

oyeeeeee que esas cosas solo me pasan a miiiiiiiiiii
Un beso

Comentado originalmente en Ya.com el
Viernes, 24 Agosto 2007 10:43

Anónimo dijo...

Jajajajajaja.... lo que me he reído. Sobre todo la parte de París. Me ha encantado.

Pero... pregunto yo indiscretamente ¿eso cuándo fue si hace siglos que no necesitamos pasaporte para ir a Francia? :D

Besos

Comentado originalmente en Ya.com el 24 Agosto 2007 16:14

Zafferano dijo...

Hola Nanny,
si no me equivoco ese viaje fue en el verano del 98. Yo no necesitaba pasaporte, con mi DNI bastaba, pero no podía acreditar la identidad de la niña y tampoco demostrar que era mi hija, porque ella sí que estaba indocumentada.
Hablaron de secuestro de niños y se armó un lío tremendo.
Con el tiempo los recuerdos se aligeran y se puede hablar de muchas cosas alegremente, pero te aseguro que
fueron unos momentos bastante angustiosos.
Un beso grande

Comentado originalmente en Ya.com el 24 Agosto 2007 16:56 (Web)